Bill y su familia residen en Brasil. Descontento con su anterior aseguradora, Bill se cambió a MSH en diciembre de 2015: "Una de las mejores decisiones que he tomado desde que estoy aquí", dice Bill, "por el nivel de servicio y por la amplitud y calidad de la red médica". La tarjeta de asegurado de Bill ya está reconocida por los mayores y mejores hospitales de São Paulo. Incluso disfruta del servicio de pago concertado en pruebas hospitalarias sencillas sin necesidad de autorización previa: "MSH te facilita la vida", dice Bill.
Rachel vive en Togo y lleva con MSH desde 2002. Tras una cirugía ordinaria, entró en un coma que duró 2 meses. Su hospitalización cuesta más de 200.000 euros, pero MSH lo cubrió todo, sin que ella tuviera que hacerse cargo de nada. Gracias a la prontitud del personal y su excelente manejo de la situación, la familia de Rachel pudo ahorrarse toda la angustia propia de la situación, al igual que Rachel cuando salió del coma.
Matthieu hacía senderismo por un cañón en Perú cuando cayó varios metros y se fracturó la rodilla y el codo: "Tras 12 días en un hospital local, me reenviaron a Francia, donde pasé 2 semanas más en otro hospital y meses de fisioterapia", recuerda. MSH cubrió todos los gastos de hospitalización, repatriación y rehabilitación de Matthieu: "Sin el seguro médico privado, habría sido una pesadilla: 16.000 € por el hospital y 50.000 € por la repatriación en dos ambulancias aéreas, ¿se imagina?"
Bill y su familia residen en Brasil. Descontento con su anterior aseguradora, Bill se cambió a MSH en diciembre de 2015: "Una de las mejores decisiones que he tomado desde que estoy aquí", dice Bill, "por el nivel de servicio y por la amplitud y calidad de la red médica". La tarjeta de asegurado de Bill ya está reconocida por los mayores y mejores hospitales de São Paulo. Incluso disfruta del servicio de pago concertado en pruebas hospitalarias sencillas sin necesidad de autorización previa: "MSH te facilita la vida", dice Bill.
Rachel vive en Togo y lleva con MSH desde 2002. Tras una cirugía ordinaria, entró en un coma que duró 2 meses. Su hospitalización cuesta más de 200.000 euros, pero MSH lo cubrió todo, sin que ella tuviera que hacerse cargo de nada. Gracias a la prontitud del personal y su excelente manejo de la situación, la familia de Rachel pudo ahorrarse toda la angustia propia de la situación, al igual que Rachel cuando salió del coma.